La historia del planeta

Lo mismo ocurre con los azotes (o cualquier práctica), ya sea con la mano, con un gato, látigo, encalla o bien cualquier otro elemento, después de golpear le efectuarás exactamente la misma pregunta y así conocerás que intensidad necesita para gozarlo.

Instantes de pasión desmandada

Las relaciones sexuales no son un pecado en sí mismas ya sea dentro o bien fuera del matrimonio. Lo que hace pecaminoso el acto es la actitud de los participantes frente a sí mismos, frente a la sociedad, a la familia, frente a la naturaleza y en frente de el blog.